Canción del inmigrante

Andrés Cisnegro, México

19 de marzo 2021

Cuántas veces nos hemos quebrado

y de esa grieta hemos brotado.

 

Agradezco el acto de volar o caer.

De flotar sobre la piedra

que minutos después

nos dividirá en dos.

 

Mi hermano una vez se miró al espejo

y encontró al migrante

atravesar el túnel, el puente, de su ser.

 

Qué clase de vibración.

La vibración del infinito.

Cuánto duele, cuánto duele

la gravedad de vivir.

 

Y por la frente un cenit de luz

el tren de Aarón, en el bruno sueño

teselas que nos trazan

ecuaciones para sonreír

ante lo incierto de viajar en el tiempo.

 

Qué clase de vibración.

La vibración del infinito.

 

Cuánto duele, cuánto duele

la gravedad de vivir.